Me gustaría contaros lo que me ha pasado hoy y como lo he resuelto.
Hace unos días, mis padres comentaron que hacía tiempo que no comían puchero ya que mi madre para ellos dos solos, no le apetece hacerlo, cosa que entiendo perfectamente.
Yo le dije que nosotros solemos hacer uno todos los fines de semana y los invité a comer a casa este domingo.
Ayer, sábado, tenía ya preparado todos los ingredientes.
Llegó, hoy por la mañana y cuando eran las 12, decidí empezar a hacerlo para que cuando llegase la hora de comer, el puchero ya estaría asentado y así estaría más rico.
Me puse a preparar las verduras y la carne y de pronto me di cuenta en el error que había cometido, se me había olvidado lo más importante. Los garbanzos!!!
Olvidé dejarlos en remojo la noche anterior, no sé lo que me entró, todo preparado y ahora me encontraba con ésto. Y ahora como les decía a mis padres que no iban a tener el puchero que tantas ganas tenían de comer?
Se me ocurrió preguntar en internet a ver como podría solucionarlo.
Estaba lo típico de poner los garbanzos de bote, que la verdad no me convencía mucho, también decían de guardar los garbanzos remojados de otra vez y congelarlos, pero ese no era mi caso, yo no había sido previsora y no guardaba en mi congelador ningunos garbanzos remojados congelados.
Así que no me servían ninguna de esas ideas.
También me encontré con varios trucos, el famoso truco de echarle el bicarbonato, pero no me convencía mucho, el de hervirlos en la olla, pero era demasiado tiempo y de pronto vi uno del microondas que por lo que contaban era facílisimo y daba resultado.
Pues me decidí por probar el truco del microondas.
Así que cogí los garbanzos y los puse con agua en un recipiente apto para el microondas, lo tapé con film transparente y previamente con la punta de un cuchillo le hice una rajita al plástico para que saliese el vapor cuando empezase a hervir el agua.
Metí el recipiente en el microondas y lo tuve 15 minutos a plena potencia.
Una vez que terminó el tiempo, ni siquiera los saqué del microondas, lo dejé una hora allí que es lo que recomendaban en el truco que vi.
Cuando pasó la hora, los saqué del recipiente como pude ya que el agua todavía quemaba y me dispuse a hacer el puchero como siempre en la olla rápida. Al tocar los garbanzos, ya me dí cuenta que el truco estaba funcionando ya que no estaban muy duros, era como si hubieran estado en remojo por mucho tiempo.
Normalmente el puchero lo suelo tener unos 20 minutos, pero esta vez como no me fiaba mucho, lo dejé 5 minutos más.
Cuando abrí la olla, lo primero que hice fue coger un garbanzo y ver como estaba. Ante mi asombro el garbanzo estaba en su punto, ni muy duro, ni muy blando.
Así que cuando llegaron mis padres a comer, yo no les dije nada de lo que me había pasado, preferí que lo probaran y me dieran su opinión. Me dijeron que estaba riquísimo, entonces es cuando les conté lo que había ocurrido. Mi madre no se lo podía creer.
Bueno, resumiendo el puchero fue todo un éxito y todo gracias al truquito que me encontré navegando por internet.
Así que ya sabéis, si alguna vez os pasa como a mí que se os olvida dejar en remojo los garbanzos o cualquier otro tipo de legumbre la noche anterior, haced el truco del microoondas que os puedo asegurar que funciona a la perfección, a mí me sacó de un apuro.
Aunque lo natural es lo mejor. Intentad que no se os olvide y dejarlos en remojo la noche anterior.
3 comentarios:
Seguro que a mi madre le encanta este post! :)
http://unchicomasenlamoda.blogspot.com.es/
P.
Espero no olvidar ese truco.
Saludos
Util el truco, gracias por compartir.
saludos
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